El rezo ante el Lignum Crucis marca el primer lunes de Cuaresma en La Isla
Por vez primera el primer lunes de Cuaresma se quedó sin el rezo del Vía-Crucis presidido por una Imagen titular de una de las cofradías de penitencia de San Fernando.
El rezo del Vía-Crucis se ha llevado a cabo en la Iglesia Mayor en un acto cargado de más recogimiento si cabe y que ha presidido desde el presbiterio el Lignum Crucis que custodia la Hermandad de la Vera-Cruz.
Con la reliquia presidiendo desde el lugar que cada año se sitúa la parihuela con el Titular de cada corporación -y que en este 2021 estaba previsto que fuera Nuestro Padre Jesús de las Tres Caídas- se han rezado las catorce estaciones ante los representantes de las hermandades y del Consejo, así como del Ayuntamiento isleño.
El arcipreste de la ciudad, Gonzalo Núñez del Castillo, ha conducido el acto penitencial ante una aforo reducido, que en la práctica se ha limitado a los representantes de las hermandades isleñas. Ha sido un acto íntimo y especialmente recogido.
Los altares del primer templo de la ciudad estaban alumbrados con velas y la luz artificial del templo quedó reducida a la mínima expresión, salvo las luces que iluminaban al presbiterio y al Lignum Crucis.
Tanto las lecturas de las estaciones como las reflexiones estuvieron a cargo respectivamente de José Luis Cordero Baro -pregonero de la Semana Santa de 2021 y que lo será de la de 2022- y Juan Ferrer Campaña -en idéntica situación pero con respecto a la presentación del cartel de la Semana Santa-.
Un acto de oración, como pidieron los sacerdotes a los cofrades en su respuesta a la petición de los altares efímeros para Semana Santa.