El Besamano a la Pastora se cerró con la presentación de los niños a la Santísima Virgen
A las seis y media de la tarde, como clausura del Besamano a la Divina Pastora, los niños recién nacidos han sido presentados ante la Santísima Virgen en un acto que cada año acoge a algunos pequeños a los que sus padres ponen bajo el amparo de la Madre de los pastoreños.
Sin la presencia, un año más, de un sacerdote en este acto, se impusieron las pequeñas medallas a los niños para después del canto de la Salve pasarlos ante la Divina Pastora como cierre del Besamano.
En esta ocasión fueron un total de cuatro recién nacidos los presentados ante la Divina Pastora, una cifra algo menor de lo que en años anteriores se ha tenido en este acto de cada 1 de noviembre.