Un Martes Santo en el Huerto con el recuerdo a un amigo
Siempre se ha dicho que el barrio de la Pastora es el barrio cofrade por excelencia de San Fernando. Sus tres cofradías representan la devoción de toda una collación que reza ante sus imágenes. La jornada del Martes Santo presenta numerosos contrastes, y en la Pastora, centra sus miradas en el Huerto de los Olivos.
Las puertas del templo pastoreño se abrían a las 18:15 para dar paso a un mar de capirotes verdes, el cortejo más numeroso de nuestras hermandades y cofradías. El paso del Señor de la Oración en el Huerto se levantaba en el interior y llegaba hasta el dintel del templo con el acompañamiento de la Coral ‘Logar de la Puente’. Tras esto, el hermano mayor de la corporación dedicaba esa primera levantá para llevarlo a la calle al fallecido cofrade, miembro de la Junta de esta corporación y amigo de ISLAPASION, Javier Nieto Tocino, fallecido el pasado mes de septiembre. Detrás del paso del Señor, la Agrupación Musical Fuensanta de Morón de la Frontera que un año más, volvió a demostrar un gran nivel.
Tras el misterio, el paso de palio de la Virgen de Gracia y Esperanza Coronada, que salía tras un homenaje también a Javies Nieto y la levantá a cargo de la pregonera del pasado año, Olga Rodríguez Méndez. Sonaba la marcha ‘Esperanza de Triana Coronada’ en recuerdo a Javi Nieto, una jornada llena de homenajes a este cofrade hortelano. Tras el palio de la dolorosa, la Banda de Música Fernando Guerrero de Los Palacios que presentaba su buen nivel acostumbrado. Una tarde de Martes Santo llena de luz, que inundó las calles de San Fernando de Esperanza. Una jornada donde la Cofradía del Huerto cambiaba ligeramente su itinerario, tomando Isaac Peral tras la Carrera Oficial.
Ya quedaron atrás esos encajes con la Hermandad de la Caridad y tener que estar atentos a posibles cruces por lo que, tras la salida de la nueva Carrera Oficial, llegaban momentos llenos de emoción, con la vuelta por las calles cercanas al barrio, y, especialmente, la bajada por la calle Maestro Portela, la calle Ancha. Se suceden las marchas y el tiempo corre más lento, la corporación llega a su barrio.
El pasado año 2022, la lluvia deslucía la vuelta de la corporación, pero en esta ocasión, la Hermandad del Huerto pudo recorrer su itinerario de vuelta sin sobresaltos, arrastrando, como cada año, a una gran cantidad de cofrades, cuando la noche cae, y la calle Ancha se torna en el Getsemaní pastoreño. La recogida, desde la eliminación del encuentro, se hace menos pesada y se disfruta más, con una plaza llena de público para ver la entrada de los pasos de la corporación hortelana. Un año más, la Isla se tiñó de verde y blanco, un año especial, más duro y de recuerdos, pero lleno de devoción al Señor de la Oración en el Huerto y la Virgen de Gracia y Esperanza Coronada.