Varias decenas de isleños se han acercado a las cinco de la tarde a las puertas del convento de las Madres Capuchinas para participar del llamamiento realizado por redes sociales en el que se animaba a acompañar a las monjas de clausura en los últimos momentos antes de su marcha y participar en una eucaristía en la que estaba previsto que presidiera el Obispo -aunque se anunció que sería con carácter privado y con la exclusiva presencia de las monjas-.
Estos mensajes coincidían con el llamamiento que realizaba esta mañana el Rvdo. P. José Francisco Piñero Serván en la misa de ocho y media de la mañana en la que animaba a participar en esta celebración eucarística. Además añadía en su intervención que «la misa se va a celebrar aunque de forma malintencionada se haya informado de lo contrario».
Finalmente ni apareció el Obispo ni se celebró misa alguna y los fieles que se acercaron tuvieron que esperar hasta las cinco y media de la tarde momento en el que una de las monjas -Sor María del Carmen- anunció que su traslado al Puerto de Santa María se prorrogaba a la jornada de mañana, miércoles 25 de enero.
La propia monja reconoció que se celebraría una misa -en el horario habitual diario de las ocho y media de la mañana- y que tras la misma partirían para el convento de su congregación en El Puerto de Santa María.
Minutos más tarde salió del convento el abogado isleño -y ex Hermano Mayor de la Hermandad de la Resurrección- José Adolfo Baturone que representa a las monjas en el litigio con el Obispado a cuenta de la resolución de Roma sobre el citado convento en el centro de la ciudad.
Baturone refrendó lo que la propia monja de clausura había comunicado a los presentes minutos antes así como aseguró que aún no se había firmado el documento por el que la comunidad debía abandonar el convento.
Por tanto esta manifestación de apoyo a las Madres Capuchinas se fue disolviendo poco a poco hasta dejar expedita la calle en la que incluso estuvo personada la Policía Local.
Habrá que esperar un día más en esta historia que supera el año de vigencia y que busca poner punto y final a la salida de las Capuchinas de nuestra ciudad. (ISLAPASIÓN).