El barrio del Cristo recibe a la Patrona entre petaladas y repique de campanas
La quinta etapa de las visitas de la Patrona por las parroquias isleñas con motivo de su 325 aniversario llevó ayer a la Santísima Virgen del Carmen desde la Parroquia de la Inmaculada Concepción a la del Santo Cristo, o lo que es lo mismo desde la Casería hasta el primero de los templos de nuevo del centro de la ciudad.
La despedida del barrio de la Casería comenzó con la celebración de la eucaristía de las siete de la tarde. Allí además de las palabras de cariño a la Virgen de su párroco, José Luis Palacio, también resonaron las de Fray David Alarcón que en su intervención final aludió a la posibilidad de que la Virgen recorriera todos los templos isleños como en esta ocasión cada siete años, cuando la festividad de la Virgen del Carmen caiga en domingo.
Minutos después de las ocho de la tarde el cortejo salía para recorrer a la inversa las calles aledañas al templo tal como llegara el día anterior. Los vecinos se habían volcado de nuevo por engalanar sus fachadas con artes de pesca, banderas y lemas en favor de la Virgen. Antonio Alías no quiso pasar la ocasión para recitarle unos versos a la Patrona antes de abandonar el barrio. Allí dejó como testamento su deseo de ser enterrado junto al escapulario carmelitano.
El recorrido por la calle Magallanes y la llegada al puente de la Casería sirvió para poder ver nuevas ofrendas de amor a la Virgen. En este camino, hasta la bajada del puente y antes de entrar en la calle San José y San Antonio la Patrona fue portada por la cuadrilla de José de la Cruz. Aquí en este punto y antes de entrar en el barrio del Santo Cristo fue la cuadrilla de José González García ‘Pepe Mellao’ la que llevó a la Patrona debido a que son la que porta el misterio de la Hermandad de los Afligidos.
El recorrido por las calles del barrio del Santo Cristo comenzó con el repicar de las campanas de la Capilla del Santísimo Cristo de la Vera-Cruz cuando el cortejo comenzó a discurrir en las proximidades de la calle Patrona. Sin duda el paso, en este primer día, por las calles del barrio del Santo Cristo tuvo su epicentro en el número 16 de la calle Servando Gutiérrez en la confluencia con la calle Santa María. Allí el Coro San Juan de la Cruz con José González García al órgano quiso dedicar la interpertación de una letra carmelitana ante la Santísima Virgen tras la cual se entonó la Salve marinera que conllevó una petalada desde una casa del barrio. Aplausos y vivas a la Virgen antes de encaminarse hasta la parroquia del Santo Cristo.
Allí llegó cerca de las diez de la noche la Patrona no sin antes recibir otra petalada ya muy próxima a la Plaza Teresa de Calcuta. En el Santo Cristo esperaba su párroco, el Rvdo. P. Luis Almario Martín junto a una representación de la Hermandad de los Afligidos. La Santísima Virgen quedó entronizada en el altar mayor del templo de donde saldrá hoy tras la eucaristía de ocho de la tarde en dirección a la Capilla del Santísimo Cristo de la Vera-Cruz.