La procesión del Corpus Christi recuperará estampas perdidas desde hace un siglo
En el presente artículo pretendemos exponer los motivos históricos que han llevado a cursar invitación este año a las imágenes de San Miguel Arcángel y a la Divina Pastora de las Almas Coronada a participar de la Solemne Procesión del Corpus Christi con motivo del Año de la Eucaristía declarado en el año 2024 por el Obispo de Cádiz y Ceuta.
Para ello, vamos a retrotraernos en el tiempo para ver como era en aquellos años la Procesión del Corpus Christi. El itinerario de la Procesión del Corpus Christi permanece prácticamente invariable en el tiempo desde que se tiene constancia documental del mismo, es decir, se realizaba la conocida como “carrera del Corpus” esto es, Plaza de Sagasta (actual de la Iglesia), Montalvo, posteriormente Muñoz Torrero (actual General García de la Herrán), Cortes, Plaza de Alfonso XII (del Rey), General Valdés, Alameda Moreno de Guerra y Constitución (Real).
El cortejo de la Procesión era el más suntuoso y amplio de los que había en la época, siendo un reflejo de los diversos estamentos sociales, militares y eclesiásticos que existían en San Fernando. En el mismo participan representaciones de las Hermandades existentes (de penitencia teníamos a Soledad, Nazareno, Vera Cruz, Santo Entierro, Expiración y Columna, además de las letíficas de Carmen, Pastora, la Asociación Josefina, la del Sagrado Corazón de Jesús y la Esclavitud de Ánimas).
Desde la segunda mitad del siglo XIX hasta el inicio de la Guerra Civil Española, la Procesión del Corpus Christi se caracterizó por una fastuosidad en su desfile procesional, llegando a llevar hasta seis pasos acompañando a SDM (como ocurrió en el año 1888 o en 1916). Vamos a centrarnos en la presencia de las imágenes del San Miguel Arcángel y la Divina Pastora de las Almas, aludiendo además a los pasos que forman actualmente parte de la Procesión del Corpus (San José y la Virgen del Carmen).
Comenzamos hablando de la participación de la Copatrona isleña en la Procesión del Corpus Christi.
Con motivo de la Restauración, se recuperó, en 1874, la Solemne Procesión del Corpus Christi, después de seis años sin efectuarse, debido a la situación convulsa de aquellos años del Sexenio Revolucionario (Gobierno Provisional, Amadeo I de Saboya y Primera República Española). Con la recuperación del Corpus, vienen también las primeras referencias a la presencia de la imagen de la Divina Pastora de las Almas en el cortejo, concretamente al año 1881 donde se cursa invitación por parte del Ayuntamiento para que la imagen de la Pastora procesionase en el Corpus. Existe constancia que, en el último cuarto del siglo XIX, la Copatrona salió en dicha procesión en los años de 1881, 1888, 1895, 1896, 1897, 1898, 1899 y 1900 (año en el que se reorganiza de nuevo la Hermandad tras un período de inactividad). Por otro lado, hay constancia documental de invitaciones en los años 1910, 1911, 1913, 1916, 1917, 1923 y 1924 (última vez que la Pastora pisó las calles de San Fernando hasta el año 1942 que volvería a salir, ya en agosto).
En aquellos años la Hermandad sacaba a la Pastora en unas andas con caídas de color blanco con unos candelabros de alumbrado de acetileno estrenados en 1918, con respiraderos de madera de líneas rectas de estilo neoclásico y adornado con jarras. Sobre un monte con flores, y cobijada bajo un árbol se disponía la imagen de la Divina Pastora (talla anónima de finales del x. XVIII adscrita a la órbita del genovés Jácome Vaccaro) que llevaba en aquellos años el terno realizado para la Procesión del Corpus Christi de 1910 por un grupo de hermanas dirigidas por las mujeres de la familia Chacón, que constaba de saya blanca (desaparecida y recreada en el año 2007 de la mano de Dolores González y Juan Guerrero) y manto rojo. Completaban el conjunto dos corderos (uno situado sobre el regazo de la Virgen y otro en la parte baja de la imagen) además de la imagen dieciochesca del Niño Jesús (el que sigue procesionando en la actualidad en la delantera del paso). Desde finales del siglo XIX hasta 1917 la Virgen era trasladada a la Iglesia Mayor Parroquial en la tarde del miércoles (recordemos que la Procesión se realizaba en la jornada de jueves, salvo los años 1923 y 1924 en los que la imagen fue trasladada en la misma mañana del Corpus (a la ida por un recorrido más corto que solía ser por Augusto Miranda, plaza del Castillo y Real, algún año por Colón y Ramón Auñón – actual Rosario), mientras que la vuelta solía recorrer Ramón Auñón (Rosario), Colón (con estación en el Convento de las Carmelitas), General Pasquín (San Rafael), Maestro Portela, Santa Ana y María (Mariana de Pineda), Santo Domingo y Pastora (Marconi). Algunos años llegó a recorrer gran parte de San Rafael para bajar la calle General Florencio Montojo, San Anacleto, Bonifaz, Doctor Cobos, Santa Teresa de Jesús, Santo Domingo y Pastora.
Por otro lado, vamos a exponer la presencia del Arcángel San Miguel en la Procesión del Corpus Christi.
En el año 1733 se funda la Esclavitud del Santísimo y Archicofradía de Benditas Ánimas. La misma llegó a tener un gran peso en la ciudad de San Fernando, contando con un amplio y artístico patrimonio entre lo que destaca, sin duda, las dos imágenes del Arcángel San Miguel (santo vinculado especialmente con el culto a las Benditas Ánimas del Purgatorio por su condición de custodio y valedor de estas): en primer lugar, tenemos la imagen del Arcángel que recibe culto en el altar de la Iglesia Mayor Parroquial, talla realizada en torno a la fundación de la Esclavitud en la década de 1730 y que era el titular de la corporación.
Por otro lado, la Esclavitud encarga la realización de una imagen vicaria de San Miguel que era la que se usaba de forma habitual en los cultos externos de la Esclavitud, una talla anónima de la segunda mitad del s. XVIII de vestir que se conserva en la Casa de Hermandad de Medinaceli. Este año de 2024 procesionará la imagen de talla completa que recibe culto en el primer templo de la ciudad.
La presencia de San Miguel en la Procesión del Corpus Christi se remonta al s. XIX teniendo constancia de su presencia en las procesiones de 1888, 1893, así como 1916, 1917 y 1923 (sabiendo que además procesionó en otras ocasiones por referencias de la prensa, incluso aludiendo a su participación durante el reinado de Isabel II en dicha procesión). Esta imagen de San Miguel era la primera del amplio cortejo del Corpus, abriendo el cortejo. La misma salía en unas sencillas andas (parihuela) de pequeño formato. Esta representación deja de procesionar con la Segunda República Española, desapareciendo su presencia en la Procesión del Corpus Christi.
Por otro lado, eran habituales también la presencia de San José y, especialmente la Santísima Virgen del Carmen (que es la imagen que más años ha acompañado a SDM en la jornada del Corpus Christi). El Santo Patrón procesionaba en el Corpus Christi, justo antes del paso de la Divina Pastora de las Almas. Su presencia está documentada desde el siglo XIX, existiendo invitaciones del Ayuntamiento para los años 1888, 1893, 1900, 1916, 1917 y 1923 (antes del Sexenio Revolucionario también procesionaba esta talla junto a la Virgen del Carmen).
La imagen de San José es una talla de autor anónimo del último cuarto del s. XVIII atribuida al escultor guipuzcoano afincado en San Fernando, José Tomás de Cirartegui Saralegui, autor del Cristo de la Expiración (1788) y el Cristo Yacente de Santo Entierro (1793). La misma procesionaba en unas andas sencillas de las que no tenemos descripción. Si sabemos que, en el año 1926, la Asociación Josefina (entidad existente en aquel entonces) encargaría un terno confeccionado por Marina Gatica, viuda de Baturone con tejidos provenientes de la madrileña Fábrica de Ornamentos litúrgicos “Garín” (conservando el traje del Niño y la túnica del Santo en la actualidad, siendo la pieza textil más antigua que ha llegado del Patrón a nuestros días). Asimismo, se estrenaron unas andas de color blanco y oro de líneas clásicas realizadas por Manuel González y que fueron estrenadas en el Corpus de ese año.
Por otro lado, la última imagen que antecedía a la Custodia era la Santísima Virgen del Carmen Coronada (como en la actualidad), talla donada por el primer prioste (Hermano Mayor) de la corporación, don Luis de Ardila en el año 1708, proviniendo de Génova. La misma procesionaba en un paso de templete (cuyo templete se conserva en la Iglesia de San Sebastian de Puerto Real) hasta que con motivo del centenario del nombramiento oficial de la Virgen del Carmen como patrona de San Fernando (algo que ya se sentía de forma popular desde el siglo XVIII) en el año 1921, y por suscripción popular, se realiza un nuevo paso para la Virgen del Carmen. Algo novedoso ya que era el primer palio para la Virgen (anteriormente iba en paso de templete). Este paso se estrenará el día 17 de julio para la procesión que llevaría a la Virgen al Ayuntamiento a la Misa de Campaña, así como al Asilo de las Carmelitas y finalmente a la Iglesia Mayor Parroquial.
El coste del paso ascendió a 21.000 pesetas (5.000 de la peana, 9.500 de los bordados entre otros gastos). Los candelabros y las andas fueron realizadas por el tallista José Gil (autor de pasos como los de San Bernardo y el Silencio, así como la Exaltación de Sevilla), los varales en plata fueron realizados en la capital hispalense en los talleres de Seco Imberg, siendo los bordados de Cádiz y de las Monjas Carmelitas de San Fernando, diseñando el conjunto el gaditano Antonio Accame Scassi. Este paso fue usado por la Hermandad del Carmen hasta la década de los 70, adquiriendo la Pastora la canastilla de este paso a principios de los 80. Por tanto, este año volveremos a ver, después de casi cincuenta años, el paso de la Virgen del Carmen en la Procesión del Corpus Christi, siendo una estampa inolvidable de la procesión.
Finalizamos con una descripción de la Procesión del Corpus Christi de un artículo del Heraldo de San Fernando del año 1923 y que decía así: “…Por la tarde a las seis y treinta salió de la Iglesia Mayor Parroquial la procesión general, que llevaba el siguiente orden: Clarineros del Excmo. Ayuntamiento, insignias de diversas asociaciones religiosas, niños de las Escuelas Cristianas con velas, pasos de San Miguel, San José y de la Divina Pastora, tras el cual iba la banda de música que dirige el señor Ramos, Junta de Gobierno de la Hermandad de Nuestra Señora del Carmen y seguidamente el soberbio paso de nuestra Patrona conducido por marineros de guerra; cruces parroquiales, asociaciones marianas, Adoración Nocturna, clero parroquial diocesano y castrense; turiferarios, presbíteros señores Cano Gay y Sánchez García; y a continuación la Custodia elegantemente exornada y conducida por los presbíteros señores Calderón, Olivares, Carrasco y Cordero. Dirigía el paso el presbítero señor Rodríguez Martín…”.
Como hemos podido analizar, la presencia de San Miguel y la Divina Pastora de las Almas Coronada en la Procesión del Corpus Christi de este año tiene una fuerte base histórica, recuperando un cortejo que la ciudad de San Fernando no ve desde el jueves 31 de mayo de 1923, año en el que se pudo ver por última vez juntas a las imágenes del Arcángel San Miguel, el Patrón San José, la Divina Pastora de las Almas Coronada y la Patrona, la Santísima Virgen del Carmen Coronada. El próximo 2 de junio, San Fernando se retrotraerá a más de un siglo para vivir una jornada histórica del Corpus, acompañando a SDM por las calles de San Fernando.