El Señor del Puerto recibió la medalla de la ciudad por los 450 años de historia nazarena
El Puerto de Santa María vivió en la tarde, noche y madrugada del 30 de agosto uno de los días históricos en el panorama cofrade con la concesión e imposición de la medalla de la ciudad a Nuestro Padre Jesús Nazareno coincidiendo con la celebración de su 450 aniversario fundacional.
La venerada imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno se asomaba minutos antes de las ocho de la tarde al dintel de la Iglesia Mayor Prioral del Puerto tras un retraso de algo más de un cuarto de hora por la coincidencia del horario de salida previsto con la celebración de un enlace matrimonial en el citado templo portuense.
El traslado desde la Prioral hasta la plaza Isaac Peral se realizó de manera presurada para recortar el tiempo perdido en la salida y sin ningún acompañamiento musical. No demasiado público en este tramo del recorrido de Jesús Nazareno que lució de manera majestuosa con la última luz de la tarde.
En la céntrica plaza del Puerto de Santa María el director espiritual de la hermandad, Diego Valle, ofició una Solemne Eucaristía de Acción de Gracias, y donde también se le impuso a la talla la Medalla de Oro de la Ciudad. La misma estuvo amenizada musicalmente por la coral polifónica San Dionisio Aeropagita, de la localidad de Jerez de la Frontera.
Tras finalizar la eucaristía, pasadas las diez de la noche, y tras discurrir todo el cortejo a través de una alfombra de sal, dio comienzo una procesión de alabanzas, donde la nota musical estuvo a cargo de la sevillana Agrupación Musical de Nuestra Señora de los Reyes, uno de los referentes en este ámbito en el panorama andaluz y nacional.
Gran afluencia de público ya con el recorrido extraordinario en el que no se paró de escuchar marchas a cargo de la formación musical sevillana que interpretó entre otras la marcha “La Oración en el Huerto” con motivo de un gesto de reconocimiento a la ayuda mostrada por la hermandad hortelana portuense.
La hora prevista para la entrada de Nuestro Padre Jesús Nazareno -prevista para las dos y media de la madrugada- en la Iglesia Mayor Prioral se alargó hasta más allá de las tres y media de la madrugada en unos últimos tramos de recorrido con mucho público y sonando marchas clásicas como “Alma de Dios” o “Caminando va por tientos”.
Jesús Nazareno estrenó para esta ocasión una túnica de sarga morada con cíngulo dorado, que ha sido donada por la Bolsa de Caridad de la propia hermandad. También otras hermandades de la ciudad donaron y prestaron algunos artículos que acompañaron al cortejo durante toda la celebración, como unas enaguas, un juego de dalmáticas, o un juego de faroles.
El paso de “el Señor de la Madrugá portuense” estuvo decorado para la ocasión con un exorno floral compuesto por un monte de lentisco verde, acompañado por matices de ruscus, clavel rojo, lisiantus azules, camelias, callas blancas, y margaritas moradas.