Vera-Cruz experimenta con un nuevo itinerario y termina recogiéndose media hora más tarde
La Hermandad de Vera-Cruz realizó en la tarde del Miércoles Santo su anual salida procesional en el que ha sido el segundo año que este portentoso paso de misterio no ha contado con acompañamiento musical.
El cortejo comenzaba a desfilar desde el Santo Cristo a buen ritmo aunque el mismo descendió en la calle Ancha aunque no tuvo obstáculo alguno ya que la Hermandad de Gran Poder pasó por Manuel Roldán con algunos minutos de adelanto dejando expedito el paso por esta zona del barrio de la Pastora.
El cortejo contó con un número de hermanos similar al de años anteriores y sin estrenos de relevancia debido a la situación económica por la que pasa la hermandad. Esta situación ha sido entendida tanto por la gerencia de la Abacería la Cañailla como por el fotógrafo José Manuel Fernández-Andes que destinaron lo recaudado en el cartel del comercio y el premio del cartel de FOCOIS respectivamente para destinarlo a la adquisición de las flores que adornaron el paso.
El descenso del ritmo desde la calle Ancha hizo que el cortejo llegara ya con algo de retraso a la Iglesia Mayor aunque mantuvo luego los horarios de salida de Carrera Oficial. Tras salir de este punto la hermandad inició su transitar por un nuevo itinerario que la llevó por la calle Pérez Galdós hasta la salida a la plaza de la Iglesia por el callejón Capataz Nicolás Carrillo. Más recogimiento y mejor respeto del público en esta parte que en la calle Las Cortes por la que volvía la hermandad en años anteriores.
Pero este cambio de itinerario supuso también una nueva acumulación de minutos de retraso que llegó a la media hora en la entrada en el templo del Santo Cristo. Este retraso vino originado además del tiempo ya perdido anteriormente de las mermadas fuerzas de una cuadrilla que obligó a variar parte del itinerario de regreso, suprimiendo la calle Nápoles y Servando Gutiérrez y cogiendo desde Patrona a San Ignacio,
Con todas las dificultades existentes los Titulares de Vera-Cruz realizaron acompañados de sus hermanos la estación de penitencia en la Iglesia Mayor y volvieron a dar testimonio de fe en la ciudad, el testimonio de fe ante las adversidades. (ISLAPASIÓN).