Se fue el 12 de septiembre. El día marcado en rojo con el que los cofrades de Columna felicitan a la Virgen de las Lágrimas cada año en la jornada del Dulce Nombre de María. Un año muy especial sin Besamano pero que dejó otras pinceladas de cariño a la Titular mariana de los cofrades del Domingo de Ramos.
Y es que como anunciara la Hermandad de Columna debido a las recomendaciones sanitarias no se realizó el Besamano que abre las puertas de la Iglesia Mayor cada 12 de septiembre para que los hermanos, fieles y devotos, posen sus besos en las manos de la dolorosa de Vicente Tena.
Era un 12 de septiembre atípico, pero no falto de tanto cariño como le tienen sus cofrades. Por ello a las seis de la tarde dio comienzo un acto, de meditaciones, que quiso encauzar todo ese cariño a la Virgen.
Tras el rezo del Ángelus por parte del Rvdo. P. Antonio Pablo Jiménez Gil, Vicario parroquial de la Iglesia Mayor, tomó la palabra Francisco Ramos, Hermano Mayor de la corporación que inició esta salutación a la Virgen, este Besamano en la palabra.
Después del Hermano Mayor fueron hasta ocho hermanos los que le hablaron a la Virgen. Nieves Sanlaureano Romero, Santiago Muñoz Romero, Ana María Nieto Gutiérrez, Lydia Ramos Sampalo -por el Grupo Joven, Javier Pardal Lorite, Juan Pedro Sánchez Serván, Manuel J. Garcia Almarcha y Nazaret Marín Crucería.
Cada uno en una forma, prosa o verso, o las dos. Cada uno con un mensaje distinto, como cuando una persona se acerca a besar la mano de la Santísima Virgen. Para pedirle o agradecerle, para alzar la voz o musitar una oración. Pero todos con el cariño que los hermanos de Columna derrochan a la Virgen de las Lágrimas. (ISLAPASIÓN).