Humildad y Paciencia da una lección de cómo reponerse a cada una de las adversidades
Todo parecía ayer jugar en contra de la Hermandad de Humildad y Paciencia. Desde por la mañana y con los partes previstos del fuerte viento de Levante para toda la jornada la Junta de Gobierno decidía hacer el primer cambio con respecto a lo previsto: el cortejo saldría y tiraría no por la Avenida Al-Andalus hasta Hornos Púnicos sino que tomaría el primer tramo de esta avenida para girar hacia Trajano, Florencio Pérez Gallardo, San Juan de la Cruz, Benjamin Lopez y Real para desde aquí continuar con el recorrido previsto.
Salía a la hora acordada la Cruz de Guía desde el barrio de la Ardila y se encaminaba por este nuevo recorrido en el que tuvo una parada obligada ante los usuarios de UPACE que fueron reubicados tras el cambio de itinerario.
Desde el primer momento el cortejo fue a un ritmo quizás superior al acostumbrado -que ya es bastante rápido en esta primera parte del itinerario- para ir marcando de forma correcta todos los puntos horarios previstos.
Al llegar a la calle San Juan de la Cruz llegó el segundo inconveniente y es que la Policía Local advirtió del desprendimiento de una cornisa en la calle Benjamín López por lo que se volvía a cambiar el itinerario. Ahora el cortejo desde San Juan de la Cruz giraría hacia Jovellanos para seguir por la Alameda del Carmen, Galiano y de aquí a la calle Real para seguir sobre lo previsto inicialmente.
El cortejo fue imprimiendo esa cadencia apresurada en cada momento para llegar a la hora acordada a la Carrera Oficial tras su paso por la Plaza de San José y el recorrido por la parte posterior de la Iglesia Mayor.
Tras la Carrera Oficial y a paso de tambor el cortejo tenía un nuevo reto que era dejar expedito el paso para la Hermandad de Cristo Rey a las 21:15 horas en el cruce de Real con Héroes del Baleares. No solo llegó a tiempo sino que le sobraron algunos minutos al paso de los últimos músicos de la Banda de Agripino Lozano.
Ya en Real camino del tradicional “callejón de los gritos” la hermandad redujo un poco su cadencia de paso ya que era el momento de disfrutar de uno de los instantes más esperados de su salida. Hasta ocho marchas empalmaron los músicos de la Agrupación Musical “Ecce-Mater” de Cádiz tras el paso del Cristo de la Humildad y Paciencia y otras tantas la antigua banda de la Cruz Roja tras el paso de palio de la Virgen de las Penas. Binomio perfecto entre cuadrilla y bandas que sirve para el deleite de los cofrades que con mucho tiempo antes cogen sitio en este apretado rincón de la ciudad.
Tras el callejón el camino de vuelta al barrio en el que hubo que sobreponerse a otro contratiempo. El fuerte viento de Levante seguía sin dar tregua por lo que la hermandad volvió a su templo por el mismo camino que había ido a la ida. Es decir, acortó por San Juan de la Cruz, Florencio Pérez Gallardo, Trajano y de aquí a la Avenida Al-Andalus para realizar el encuentro entre los dos pasos.
Un encuentro que fue también algo más corto de lo habitual -por el viento- y que dejó quizás con ganas de un poco más a los cofrades de Humildad y Paciencia que en la jornada de ayer dieron toda una lección de como reponerse ante las adversidades. (ISLAPASIÓN).