Hermandad de la Vera-Cruz

El Cristo de la Vera-Cruz recorrió, de forma austera y silente, las calles de su barrio



La Hermandad de la Vera-Cruz volvió a hacer gala del carácter sobrio y elegante cada vez que pone en la calle cualquiera de sus cortejos. En la noche de ayer pudo verse con la celebración del anual Vía-Crucis que esta corporación realiza presidida por el Santísimo Cristo de la Vera-Cruz por las calles de la feligresía del Santo Cristo.

El cortejo formado por hermanos de la cofradía a los que acompañaban una amplia representación de la Hermandad del Nazareno -por su hermanamiento- y de la de los Afligidos radicada también en el templo del Santo Cristo.

Tanto las oraciones como las meditaciones eran dirigidas tanto por el párroco del Santo Cristo como por el vicario parroquial que rompían con sus palabras el silencio en las calles del itinerario previsto.

Solo en un momento este silencio se rompió con el sonido de una campana justo en el momento que el Titular cristífero de esta cofradía pasaba ante las puertas de la capilla que lleva su mismo nombre y que desde algunos años ya no acoge a los Titulares de la cofradía desde que se comenzaran los trabajos para rehabilitar este espacio.

La imagen del Santísimo Cristo fue portada por hermanos y fieles del barrio del Santo Cristo representados también por el vicepresidente de su consejo pastoral, Manuel Lora, dentro de la presidencia del cortejo. (ISLAPASIÓN).