Esta tarde se ha llevado a cabo el traslado de la Virgen de la Piedad desde el Convento de la Santísima Trinidad de las Carmelitas Descalzas a la Iglesia conventual del Carmen. El traslado comenzaba tras el reconocimiento por parte de la hermandad a la comunidad religiosa haciéndolas camaristas honorarias de la Santísima Virgen con la entrega de un cuadro con una orla que lo referencia.
Tras esto comenzaba el traslado, de algo más de cuarenta minutos, desde la puerta trasera del convento hasta la Iglesia del Carmen. La salida, con los impedimentos propios de la altura de la puerta, hizo que se tuviera que esperar algunos minutos. El recorrido, que distaba en pocos metros, se hizo de manera ágil y con la ayuda de la Policía Local que acompañaba a la hermandad.
En el dintel del templo carmelitano esperaban representaciones de las hermandades del Santo Entierro y Carmen que daban la bienvenida junto a la comunidad de Padres Carmelitas al citado templo. La parihuela con la Santísima Virgen se apostó primero ante el presbiterio, momento en el que se realizó un agradecimiento por parte del Hermano Mayor de la Misericordia por esta acogida y tras esto la Virgen fue posada junto a la Patrona en la capilla sacramental del templo.
La Virgen de la Piedad regresará a la Divina Pastora el domingo a las once de la mañana tras la eucaristía en la que se refrendará el hermanamiento entre las corporaciones de Misericordia y el Carmen dentro del marco del 50 aniversario de María Santísima de la Piedad.
