Las personas que sufren secuelas de un accidente o enfermedad en España, tiene derecho a solicitar la incapacidad permanente. El Tribunal Médico del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) será el encargado de otorgar el grado de incapacidad correspondiente al afectado, siempre y cuando considere que debe tener derecho a percibir la ayuda.
El trámite para recibir la pensión por incapacidad permanente puede ser largo y tedioso en muchos casos, debido a que la solicitud siempre se debe llevar a cabo por la vía administrativa. Así, en ocasiones las revisiones, la entrega de documentos y las pruebas pertinentes pueden durar varios meses.
¿Qué pasa si niegan la incapacidad permanente?
En el caso de que el Tribunal Médico niegue el derecho a percibir una pensión por incapacidad permanente, el afectado cuenta con varias vías para seguir adelante con su objetivo de conseguir la prestación. En estos casos, será el trabajador quien deba realizar una serie de trámites para intentar que le concedan la prestación.
En primer lugar, si una persona recibe la negativa de la Seguridad Social, deberá presentar una Reclamación Previa ante el propio Instituto Nacional de la Seguridad Social. La persona solicitante dispone de 30 días hábiles desde la notificación del INSS para presentarla.
Posteriormente, la Seguridad Social deberá ofrecer una nueva resolución en relación a esta Reclamación Previa al trabajador afectado que quiere obtener el derecho a cobrar una incapacidad.
Este proceso de reclamación no asegura al trabajador la obtención de la incapacidad permanente. A pesar de que tiene muchas posibilidades de que la resolución sea positiva, pueden volver a negarse a otorgar la pensión al afectado.
Qué hacer si tras la reclamación vuelven a denegar la incapacidad
Si tras la reclamación vuelven a denegar la pensión de incapacidad permanente, solo queda ir por vía judicial. No obstante, comenzar este proceso debe hacerse habiéndolo pensado muy bien, ya que se deberá demandar a la Seguridad Social.
En cualquier caso, es preciso tener en consideración los aspectos jurídicos y los aspectos médico-periciales. Para ello, te recomendamos que contrates los servicios de un abogado especialista que siga tu proceso de demanda en primer plano. El profesional estudiará tu caso para ver si existen posibilidades reales de éxito a corto plazo.
El afectado dispone de 30 días hábiles desde la última resolución del Tribunal Médico para demandar a la Seguridad Social por vía judicial. A través de esta vía, en los Juzgados de lo Social, el trabajador puede conseguir la incapacidad permanente. Si bien, también es posible que los magistrados den la razón al INSS y no le concedan la incapacidad.