Jesús Atado y Flagelado a la Columna presidió el Vía-Crucis por las calles de la feligresía
Nuestro Padre Jesús Atado y Flagelado a la Columna presidió en la noche de ayer el tradicional Vía-Crucis que la hermandad del Domingo de Ramos celebra en Cuaresma.
En esta ocasión, y con motivo de la celebración del 125 aniversario fundacional de la corporación, este acto se revistió de algún elemento extraordinario.
Con motivo de esta efemérides se podía ver al Señor con un paño de pureza a modo de faldellín de tul bordado con hilos dorados y el pensamiento compuesto de tres pétalos representando a la Santísima Trinidad y representativo de la época romántica del siglo XIX donde nace la hermandad.
Algo más de dos horas duró el rezo de las estaciones por las calles anexas a la Iglesia Mayor que en una fría noche de marzo acompañaron al Titular cristífero de la Hermandad de Columna. (ISLAPASIÓN).