El Niño Jesús de Praga salió rodeado de los más jóvenes del Liceo
El fuerte viento de levante que se registraba en la tarde de ayer no contuvo la procesión de alabanza con la bendita imagen del Niño Jesús de Praga que organizó la Comunidad de Padres Carmelitas Descalzos y la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen.
Pasadas las seis de la tarde el cortejo comenzaba a discurrir por la Plaza del Carmen. El mismo estaba formado por los alumnos del Colegio Liceo Sagrado Corazón así como por los integrantes de los Grupos Jóvenes de las Hermandades del Carmen y del Santo Entierro. Antes del cuerpo de ciriales y con motivo de la celebración del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús, se mostraba una Reliquia de la Santa de Ávila, perteneciente al convento carmelita de nuestra Ciudad.
El Bendito Niño fue portado por niños y niñas que han realizado este año su Primera Comunión tanto del Colegio Liceo Sagrado Corazón como de la Parroquia del Carmen . Aunque muchos fueron los que durante su recorrido quisieron meterse bajo las andas, desde los más pequeños hasta los miembros del Grupo Joven y comunidad parroquial.
La procesión recorrió el siguiente itinerario: Real, Alcedo, Lauría, Santa Bárbara, Santa Gertrudis, Olivarillo, Lauría, Plaza del Mercado de San Antonio, San Antonio, Real, Plaza Alameda del Carmen y Real, llegando al templo carmelitano en torno a las ocho de la tarde.
En la calle Santa Gertrudis se incorporó al cortejo procesional la Virgen del Carmen “Callejolera”, después de que el pasado lunes comenzara su peregrinar por las casas y patios de vecinos del barrio del Carmen.
La banda de música de la ACM San José Artesano acompañó con sus sones al Niño Jesús con un exquisito y cuidado repertorio. Ya llegando a la plaza del Carmen se pudieron escuchar marchas como “Mi Amargura” o “Pasa la Esperanza de Triana”.
En la recogida se produjo el encuentro entre la Virgen del Carmen “Callejolera” y el Niño Jesús de Praga. Tras sonar el himno nacional se puso el cierre a la procesión de alabanzas en una tarde donde el calor y el viento no fueron motivos para menguar la multitud de público que acompañó al cortejo procesional durante todo su recorrido. (ISLAPASIÓN).
